El nombre hace referencia al Sil, el río más vinícola de Galicia que tras su paso por Bierzo atraviesa las denominaciones de Valdeorras y Ribeira Sacra. El suelo característico de Vilamartín es el esquisto (no hay que olvidar que Valdeorras produce el 90% de la pizarra de todo el mundo), mayoritario en las 20 hectáreas que tiene en propiedad la bodega, aunque también hay presencia de granito. 

VALDESIL

Situada de Vilamartín de Valdeorras, esta bodega familiar con tradición vitícola centenaria puede presumir de tener los viñedos de godello más viejos de la denominación, notablemente el increíble Pedrouzos, que se habría plantado en 1885, justo después de la filoxera, y del que la familia ha ido tomando material vegetal para realizar el resto de sus plantaciones; de hecho, la bodega cuenta con su propio vivero.

Su etapa moderna arranca en 1990 con el objetivo de recuperar muchos de los viñedos originarios que se habían vendido o dispersado entre distintos miembros de la familia. Precisamente, el blanco fermentado en barrica Pezas da Portela hace referencia al encaje de muchas pequeñas parcelas localmente conocidas como "pezas". A la tradición vitícola hay que añadir la experiencia del padre, Francisco Prada Gayoso, un gran experto en el negocio concursal, tras su paso como presidente del Consejo de Administración de Olarra en Rioja. En la actualidad la bodega está gestionada por sus hijos Guillermo, Borja (director técnico) y Raúl (director comercial).

Valdesil produce unas 140.000 botellas al año y exporta a más de 30 países. Todos los vinos blancos son monovarietales de godello.